En los eslabones de las distintas cadenas se advirtió una notable merma en la cantidad de clientes. Los almacenes y despensas trabajaron más que otros días, pero menos de lo que esperaban.
Una recorrida efectuada ayer por varios eslabones de hipermercados que existen en la ciudad permitió comprobar que a media mañana, cuando habitualmente hay muchas personas recorriendo las góndolas, era importante la adhesión al boicot a las compras que -a nivel nacional- fuera convocado por asociaciones de consumidores y gremios en señal de protesta por el alza de precios que esos establecimientos vienen aplicando reiteradamente a los productos que comercializan.
La determinación adoptada en tal sentido fue motivo de comentario en la mayoría de los almacenes y despensas que, como era de suponer, recibieron más clientes que otros días aunque menos de los que esperaban.
En el comercio ubicado en Jara esquina Colón, su titular, Daniel Gustavo García, manifestó que “en nuestro caso, además de un servicio personalizado, tratamos de darle a los clientes la mejor calidad a un precio adecuado. Para ello nos manejamos con márgenes de ganancia muy reducidos. Es la forma que nos permite competir con los supermercados que tienen más posibilidades de publicitar masivamente sus ofertas y trabajan con tarjetas que permiten pagar en cuotas. Mucha gente cree que los hipermercados tienen precios más convenientes que los negocios de barrio, pero la realidad indica que esto no es así”, afirmó. Posteriormente, tras expresar que “otra ventaja que brindamos los almaceneros es el fiado con el cual favorecemos a quienes, siendo clientes, a veces están faltos de dinero”, dijo que aún así, las ventas están tranquilas ya que la gente, como se encuentra muy atemorizada por los fuertes aumentos que se van a aplicar en las tarifas del gas y de la energía eléctrica, se limita a comprar sólo lo que le resulta indispensable”.
Rodolfo Ropa, propietario de un almacén sito en Perú y Falucho, sostuvo por su parte que “a pesar del boicot a los supermercados tengo que admitir que el movimiento es similar al de otros días. Con 35 años de trayectoria, estoy convencido de que, en materia de precios, a pesar de que los negocios pequeños le compramos a los mayoristas y ellos a los fabricantes, vendemos mucho más barato que esos establecimientos. Es consecuencia de que nuestros márgenes de utilidad son más reducidos”, afirmó.
Daniel Mellino, titular de un supermercado sito en Belgrano casi Independencia manifestó en tanto que “me parece muy bien el boicot que se les está aplicando a las grandes cadenas. Mientras los pequeños y medianos comerciantes marcamos con un 30% ó 40% de utilidad, los hipermercados, salvo para algunas ofertas puntuales que nosotros no tenemos, aplican entre un 90% y un 100%.
En mi caso, acepto tarjetas de crédito. Lamentablemente los precios siguen subiendo”, admitió, agregando que “cada vez hay más gente que pide fiado, un beneficio que limitamos a los que son clientes”.
Hablan más almaceneros
En un almacén sito en Catamarca casi Moreno Sebastián Mansilla manifestó que “estamos trabajando bien, normalmente. Hay gente que se hizo clienta porque advirtió y nos lo dice, que tenemos precios más convenientes que los supermercados que, a manera de gancho para atraer clientes, promocionan alguna oferta puntual”.
Miguel Angel Rivero, propietario de la despensa y fiambrería sita en Chaco 4.405 dijo por su lado que “para atraer clientes básicamente recurrimos a implementar ofertas de fiambres y embutidos, que los tenemos mucho más baratos que los supermercados, y a brindar una buena atención. Es nuestra forma de ayudar a la gente y, a su vez,
de lograr mayor volumen de ventas. Lamentablemente los precios vienen subiendo todas las semanas por lo cual, mientras los gastos fijos cada vez son mayores, las ventas siguen flojas. El interrogante que se plantea es en torno a lo que puede llegar a pasar en los meses de invierno”, afirmó.-